En Estados Unidos, mientras crecen con celeridad los casos de coronavirus, se incrementan y con mayor velocidad los pedidos de subsidio de desempleo, con récord total: las solicitudes ya son 6,6 millones en medio de una parálisis de la actividad económica muy fuerte.
La cuarentena obligatoria que impusieron distintos estados hizo que miles de comercios bajen sus persianas y el personal sea despedido. La tasa de desempleo, que era de 3,5% en febrero, trepará a niveles todavía difíciles de precisar pero que, según diferentes pronósticos de economistas, oscilarán entre 12% y 25% en el segundo trimestre. Esos porcentajes son compatibles con una caída del PIB en el segundo trimestre que puede alcanzar 14% según JP Morgan o hasta el 25%, según Goldman Sachs.
El presidente en Estados Unidos de Oxfords Economics, Gregory Daco, señaló que “el mercado laboral estadounidense se halla en caída libre» y que “la perspectiva de un aislamiento aún más estricto y el factor de que muchos estados todavía no han completado el cómputo total de peticiones de desempleo sugieren que lo peor aún está por venir”.
Estados Unidos: Son récord los pedidos de seguro de desempleo
Ante las perdidas que ocasiona el aislamiento social obligatorio, lo primero que realizan las compañías es un ajuste de personal. Prueba de ello es lo que informó la cadena de ropa Macys, que va a prescindir de 130 mil personas. La empresa solo tendrá, por lo menos hasta mayo, personal mínimo y dio permisos de trabajo «no remunerados».
La firma expresó que espera «volver a incorporar a nuestros colegas escalonadamente a medida que se reanude el negocio», y determinó que el brote de coronavirus «sigue suponiendo una pesada carga» en su negocio pero su «prioridad más alta es la salud» de sus clientes y empleados.
