Héctor Daer, cosecretario General de la Confederación General del Trabajo (CGT) defendió la postura gremial de exigencia de la “clausula gatilllo” para las próximas negociaciones paritarias, despegándose de la sugerencia del presidente Alberto Fernández, quien esta semana había sugerido eliminarla.
Para Daer, el mecanismo apunta a “preservar el poder adquisitivo” de los salarios en un contexto donde la inflación todavía no está controlada. Luego ratificó la necesidad de la cláusula gatillo explicando: “El proceso inflacionario tuvo una mayor dinámica en el segundo semestre del año pasado. Por eso mismo vamos a tener una inercia inflacionaria durante parte de este año”.
También consideró que muchos sectores empresarios fueron «muy poco generosos con la realidad social de nuestro país», decidiendo «acumular precios en los últimos meses porque sabían que Cambiemos se iba y quisieron hacer un colchón importante». En tal sentido, insistió con que «tiene que haber mayor responsabilidad de los empresarios para no trasladar nada a los precios».
El gremialista explicó que la sugerencia de Alberto Fernández respecto de la eliminación de la cláusula gatillo tiene que ver con su posición de que la no existencia de este mecanismo favorecería la «desindexación» de la economía nacional, lo que reconoció que sería «lo mejor que puede pasarnos». Luego planteó que no es necesario «abrir un debate» sobre este tema «sino sobre cómo vamos a cubrir cada una de las actividades, porque hay un mapa heterogéneo, donde algunos pudieron seguir la inflación y otros perdieron un 25%».
El dirigente de Sanidad alertó sobre sectores de la sociedad argentina que «están detrás de la puerta esperando el fracaso» del gobierno de Alberto Fernández, pero anticipó que «se van a acalambrar, pues la llegada de este gobierno generó una esperanza en el pueblo».
Daer también aprovecho para criticar al ex candidato a vicepresidente de Juntos por el Cambio, el ex senador peronista Miguel Ángel Pichetto, de quien consideró que le “jugo a la política con una moneda de dos caras y le salió seca. Es una falta de respeto sobre todo desde la cuestión democrática. Hay que aceptar un gobierno que hace un mes y días que asumió y que se empezó a encargar de los que tienen hambre. Ante se negaba que había habitantes de este país que pasaban hambre”. Para terminar también cargó contra la “herencia” que deja el gobierno de Mauricio Macri en forma de “deuda externa, deuda social y deudas dentro del Estado”.
