El tradicional supermercado sureño comunicó ayer el despido de 27 trabajadores en Río Grande y 11 en Ushuaia y, a través de gestiones gremiales intentan el cobro de indemnizaciones que corresponden por ley.
El dirigente del Centro de Empleados de Comercio, Daniel Rivarola señaló que los despidos venían siendo por goteo pero que se han vuelto masivos y ya suman 52 bajas en lo que va del año y más de 200 en las sucursales de toda la Patagonia.
Según el dirigente hay una especie de “zona liberada” del control del Ministerio de Trabajo, que incluye despidos sin pago de indemnizaciones en algunos casos, deuda de aguinaldos y empleo en negro que viene denunciando el sindicato.
Rivarola lo atribuyó directamente a las políticas que ejecuta el gobierno nacional: “mientras siga este gobierno nacional Tierra del Fuego está muy complicada”, advirtió.
Al haber despidos sin causa en el sector privado, “no obedece a una situación específica sino a una decisión empresarial. La multa por esa decisión unilateral es el pago de las indemnizaciones por antigüedad y preaviso”, expresó.
Pese a su cercana relación con el Gobierno, desde la empresa manifiestan una severa crisis en las ventas y que en la relación costos-ganancias vienen en pérdida.